Hajrija Imeri-Mihaljić

  • Resumen
  • Historia Completa

Hajrija Imeri-Mihaljić era una mujer romaní de Kosovo,que vivía en el pueblo de Ade con su familia de cinco hijos y trabajaba, desde su juventud, como empleada doméstica en la casa de Ester Baruch, en Kosovska Mitrovica.

Esther vivía con su hija Kubica y su marido Blagoje.

El 27 de enero de 1940 el matrimonio tuvo una niña, a quien llamaron Esther Stella, en honor a su abuela.

En la primavera de 1941 los nazis invaden la región.

Ante esta situación Kubica y su esposo deciden huir a las montañas para unirse a los partisanos., dejando a Stela al cuidado de su abuela.

En mayo de 1942, los alemanes dieron la orden de arrestar a todos los judíos de Kosovska Mitrovica, que contaba con una población de cien judíos.

Hajrija Imeri-Mihaljić era una mujer romaní de Kosovo,que vivía en el pueblo de Ade

con su familia de cinco hijos y trabajaba, desde su juventud, como empleada

doméstica en la casa de Ester Baruch, en Kosovska Mitrovica.

Esther vivía con su hija Kubica y su marido Blagoje.

El 27 de enero de 1940 el matrimonio tuvo una niña, a quien llamaron Esther Stella ,

en honor a su abuela.

En la primavera de 1941 los nazis invaden la región.

Ante esta situación Kubica y su esposo deciden huir a las montañas para unirse a los partisanos., dejando a Stela al cuidado de su abuela.

En mayo de 1942, los alemanes dieron la orden de arrestar a todos los judíos de Kosovska Mitrovica, que contaba con una población de cien judíos.

Ester Baruch y su nieta de dos años, Ester Stela Acević, fueron arrestadas e internadas en el gueto de tránsito de la ciudad.

Hajrija, se enteró del arresto de Ester y fue con tres de sus hijos a visitarla al campo de tránsito donde estaban los Baruch.

El encuentro fue breve pero, en el poco tiempo que tuvieron, la abuela entregó a la pequeña Ester a Hajrija.y le dijo :

“Soy vieja y no importa lo que me pase, pero esta niña debe vivir .

Si su familia sobrevive a la guerra, vendrán por ella.

Si no, críala como a tu propia hija y algún día dile quiénes son sus padres”.

Hajrija logró sacar a Ester del campamento, cargándola en brazos y, junto con sus hijos,regresaron a la aldea.

El nombre de Ester fue cambiado a Miradija y fue criada como una más de los niños gitanos.

Después de la guerra, cuando Hajrija preguntó por la familia Baruch, le dijeron que la abuela Ester Baruch había muerto en Sajmište

y que los padres de Ester habían muerto con los partisanos.

Ante esta realidad , Harija cumplió con lo que Esther le había pedido,le contó a la niña que ella no era su verdadera madre y que su nombre no era Miradija sino Ester-Stela Baruch.

En 1945, durante una disputa por tierras entre la familia de Hajrija y sus vecinos, el vecino denunció a su esposo a la policía bajo el cargo de robar a una niña judía y tenerla en su casa.

La policía llegó al pueblo para investigar la historia. Hajrija les dijo la verdad y unos días después los policías regresaron al pueblo acompañados por representantes de la comunidad judía de Priština.

Estos le agradecieron por salvar a la niña judía ,se disculparon y le explicaron que debían llevarla a un orfanato donde reunían a todos los niños judíos que habían quedado huérfanos.

El llanto de Hajrija no les impidió sacar a la niña.

Ester, que fue llevada con una familia judía en Priština, también lloró, se negó a comer y les rogó que la llevaran de regreso con su “madre”.

La niña fue trasladada al poco tiempo al orfanato judío de Belgrado.

Allí, con la mediación de una de las niñeras de Kosovo que entendía el idioma gitano,una asistente se acercó a ella y le preguntó:

"¿Cómo te llamas?". "Mi nombre es Miradia, pero mi verdadero nombre es Ester.

Mi mamá Hajrija me contó que mi verdadero nombre era Ester-Stela Baruch,que el nombre de mi abuela era Ester Baruch y que el nombre de mi madre

era Jaffa-Bukica Bahar"..

Al escuchar esta información, la asistente perdió el conocimiento.

Cuando despertó, exclamó que Ester era su hija.

BuKica llevó a la niña a su casa, pero esta se negó a aceptarla e insistió en que Hajrija era su madre,

Stella no quería saber nada de ella y seguía pidiendo por su madre, Hajrija..

Mientras tanto Hajrija tampoco estaba tranquila ,quería ver con sus propios ojos lo que le habían hecho a su Miradia.

Se dirigió hacia Belgrado, a veces a pie, a veces en carretas de bueyes, y llegó al Hogar para abrazar una vez más a su Miradia.

Cuando vio que Stella había encontrado a su madre, que no fue asesinada por los partisanos, las tres mujeres se abrazaron.

Hajrija sintió que su misión ya había sido cumplida y decidió irse dejando a madre e hija consolidar su relación.

Kubica se casó con un compañero de trabajo y en 1948 decidieron emigrar a Israel junto con Stela.

La madre de Ester mantuvo contacto con Hajrija hasta el día en que emigraron.

Stella llevó el amor por su madre Hajrija en su corazón toda su vida y le resultó difícil aceptar a su nueva madre, a pesar de que su razón se lo decía.

Le escribió y la buscó pero nunca recibió respuesta.

Finalmente a mediados de 1970 viajó a Macedonia , pero no encontró rastro de ella.

Finalmente un estudioso del mundo romaní le informó que el marido de Hajrija la echó de la casa y que ella había muerto en Pristina, donde deambulaba mendigando ,alrededor del año 1990 .

En ese momento Stella decidió que aunque no podía volver a ver a su querida Hajrija ,ni hacer nada por ella, podía transmitir su historia y así honrar su recuerdo y su memoria.

Entonces decidió  presentarse en Yad Vashem y contar su propia historia..

Stella, hoy Esther Levy, vive en Ramat Gan con su familia.

El 21 de agosto de 1991, Yad Vashem reconoció a Hajrija Imeri-Mihaljić como Justa entre las Naciones.

Su nombre fue grabado en el Muro de Honor en el Jardín de los Justos y Ester plantó un árbol a su memoria.

Hajrija Imeri-Mihaljić es la única mujer romaní cuyo nombre está grabado en el Muro de Honor en el Jardín de los Justos del Museo Conmemorativo de Yad Vashem en Jerusalén.

La película “Pravednica Cyganka”,se basó en esta historia.

Fue filmada en el año 2016 y dirigida por Jakov y Dominik Sedlar.

Como no hay fotografías de Hajrija, la pintora Aleksandra Alfirevic , por encargo del director, creó su retrato basándose en el testimonio de testigos presenciales.

Hajrija fue descipta como una mujer menudad, de piel mate, rostro redondo, grandes ojos negros y cabello recogido con unpañuelo tradicional.

En el parque del Centro Conmemorativo de los Romaníes en Ustica -Croacia, se instaló el 2 de agosto de 2023 la obra del escultor Marín Marinic, llamada Justa de las Naciones, es una escultura en honor a Hajrija Imeri Mihaljic.

Fuentes:

Yad Vashem.

Roma y sinti en la resistencia europea, de Angelo Arlati (UPRE Edizioni,

2022)

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