Tadeusz Pankiewicz

Tadeusz Pankiewicz nació en Sambor -Polonia (actualmente Ucrania) el 21 de noviembre de 1908.

Fue el más joven de los tres hijos de Józef Pankiewicz y Maria Weirich, oriundos de la región de Galitzia.

Maria Weirich era hija del matrimonio entre un alemán y una húngara, razón por la que Pankiewicz fue catalogado durante la ocupación alemana como ario, según los estándares raciales del III Reich.

En 1910, Józef Pankiewicz ,abrió la Apteka Pod Orlem o farmacia "Bajo el Águila en Podgorze, Cracovia.

Los tres hijos del matrimonio estudiaron en el Colegio número 6 de esta localidad, compartiendo aula con jóvenes de diferentes orígenes étnicos, incluidos alumnos judíos.

Al inicio de la Primera Guerra Mundial, el hermano de Tadeusz, León Pankiewicz, fue arrestado por el ejército imperial ruso junto a un gran número de jóvenes polacos y falleció a causa del confinamiento; su hermana Zofia contrajo matrimonio, y Tadeusz siguió los pasos de su padre, graduándose en la Facultad de Farmacia y haciéndose cargo del negocio familiar a partir de 1934.

Después de la invasión de Polonia por parte de la Alemania nazi el 1 de septiembre de 1939, Pankiewicz abandona la ciudad junto a cientos de profesionales y autoridades civiles, y se establece en la ciudad de Lwów, Deja al frente de su establecimiento a una farmacéutica llamada Irena Droździkowska, quien se convertiría en colaboradora de Pankiewicz a su regreso de este exilio.

Tras la caída de Cracovia a manos de las tropas nazis, Pankiewicz regresa el 9 de septiembre, y es arrestado y conducido a la prisión de Montelupich, donde permaneció hasta diciembre de ese año. Tras abandonar la cárcel, regresa a casa y se hace cargo del negocio familiar, ya sin la asistencia de su padre, gravemente enfermo.

Para ayudarle, además de Irena, Pankiewicz contrata los servicios de dos estudiantes de tercer año de la Facultad de Farmacia: Helena Krywaniuk y Aurelia Danek-Czortowa.

En 1941,tras casi dos años de ocupación, siendo Cracovia capital del llamado Gobierno General, las autoridades alemanes ordenan el establecimiento de un gueto amurallado en el distrito de Podgórze.

Se conmina a Pankiewicz a abandonar el «Distrito Judío», al igual que sus padres, quienes se trasladan al centro de la ciudad. Tadeusz, sin embargo, soborna a las diferentes fuerzas de ocupación, civiles y militares, consiguiendo un salvoconducto que le permite residir en el gueto y mantener la farmacia abierta, a fin de proveer de atención, medicamentos y cuidados a sus habitantes.

Durante los dos años de existencia del gueto, hasta 1943, Pankiewicz y sus tres colegas prestarán auxilio a los judíos allí confinados.

Proporcionó medicamentos a quienes los necesitaban,y convirtió su farmacia en punto de encuentro para la intelectualidad del gueto, que se reunía allí para enterarse de las noticias y para mantener contacto con la gente del lado ario.

El y sus colegas favoreciieron el contrabando de toda suerte de productos, desde comida hasta prensa clandestina.

Consiguieron mediante sobornos, favores y dádivas que cientos de personas pudieran escapar a la suerte que les esperaba con su deportación a campos de exterminio.

Pankiewicz ocultó al Dr. Abraham Mirowski en su farmacia, así como a Irena Halpern, quien quedó atrapada en una redada, y Pankiewicz la ocultó detrás del mostrador y la cubrió con su propio cuerpo, salvándola así del transporte a los campos.

Irena ya conocía a Pankiewicz de las muchas veces que había frecuentado la farmacia para comprar medicamentos para su madre enferma. Pankiewicz se había negado a aceptar dinero de ella, y se enteró de que no era la única en el gueto que recibía medicamentos sin pago.

Tras la derrota del nazismo y el establecimiento de la una República Popular en Polonia bajo la órbita de la Unión

Soviética, Pankiewicz sufrió el desprecio y negación en su patria, determinado por la coyuntura de la Guerra Fría y de su amistad con un gran número de judíos residentes en el recién constituido Estado de Israel.

A pesar de perder su farmacia, y sufrir el acoso de la policía secreta del régimen comunista en Polonia, Pankiewicz no bajó los brazos ni se sumió en el silencio, y como testigo de excepción de los crímenes y horrores cometidos por las fuerzas de ocupación y las unidades colaboracionistas, dejó constancia de sus vivencias en sus Memorias publicadas en 1947.

En ellas refiere a «mis colegas» (su ayudante y los estudiantes que contrató para la farmacia), destacando Pankiewicz su coraje y determinación al salvar las vidas de cientos de personas en el gueto.

Estas fueron traducidas a distintos idiomas y reeditadas en una edición ampliada y corregida por el autor en 1982. y vio cómo sus Memorias eran bien acogidas en Europa occidental, Israel y Estados Unidos.

Tadeusz Pankiewicz Apteka w getcie krakowskim. Cracovia, Wydawnictwo Literackie, 2003, polaco.

La farmacia del gueto de Cracovia. Burgos, 2019, 464 pp. en castellano.

En la década de 1980, el gobierno polaco rehabilitó el nombre de Pankiewicz, y se sucedieron las distinciones, entre las que destacan la conversión en un museo de su antigua farmacia, la Apteka Pod Orlem.

Las acciones de Pankiewicz para salvar judíos estaban motivadas por sus principios humanitarios y patrióticos, y muchos de aquellos a quienes ayudó le deben la vida.

Tadeusz Pankiewicz fue reconocido como «Justo entre las Naciones» por Yad Vashem el 10 de febrero de 1983 .

Tadeusz Pankiewicz murió en 1993; sus restos mortales descansan en el Cementerio Rakowicki de Cracovia.