Danuta Josefa Slazak Galkowa

Józef Slazak (1901-1944)

Agnieszka Starzyńska.(1900-1980)

Danusia, así la llamaba su hermana adoptiva, la uruguaya Giza Alterwajn de Goldfarb . Esta es su historia.

Giza nació en noviembre de 1940 en el Gueto de Varsovia.  Sus padres entendieron que no había salida y lograron sacarla en un bolso del ghetto, llevándola a una casa de familia que aceptó recibirla y adoptarla como a una hija, era la familia Slazak.

Esta familia estaba compuesta por Jozef, Agnieszka y sus cinco hijos, de los cuáles la mayor era Danuta. Ella tenía 17 años cuando Giza llegó con apenas 5 meses de edad, convirtiéndose en la hermana menor.

Sólo los padres y Danuta conocían el origen de Giza, ya que temían que los vecinos se enteraran y los denunciaran.

En ese momento Danuta ya era partisana y fue fundamental en el rescate de Giza, ya que obtuvo documentos de identificación falsos para la niña a nombre de Stefania Szymkowiak.

Giza vivió con la Familia Slazak casi cinco años y medio, hasta un tiempo después del fin de la guerra en que los tíos ,que sobrevivieron vinieron a buscarla y se la llevaron a Uruguay.

Danuta era enfermera, soldada de la Unión de Lucha Armada del distrito de Varsovia y llegó al rango de coronel. Fue partisana y participó de la resistencia.

Salvó a 21 soldados heridos de un hospital en llamas y a muchos ciudadanos polacos de origen judío. 

Danusia nunca olvidó a Giza y la buscó durante 65 años y gracias a un familiar de Giza que viajo a Polonia se pudieron reencontrar. 

Giza había sufrido una amnesia selectiva y no recordaba prácticamente nada de esa época, pero su reencuentro con su hermana mayor le sirvió para volver a un mundo afectivo guardado que le dio a su vida un sentido diferente.

Giza relató: “Una vez la portera del edificio denunció a la familia a la policía. Les dijo que a la señora Slazak hace tiempo que no la veía embarazada y de la noche a la mañana apareció un bebé en la casa. Pero la familia era muy querida y en la comisaría trabajaba un agente de policía que era muy amigo y que le debía muchos favores a esa familia. Corrió a la casa a avisarles lo que estaba pasando y ahí un cura (allegado a la familia) confeccionó mi fe de bautismo, de modo de que pareciera que era la sobrina de ellos, la hija de un primo que falleció en la guerra. Cuando llegó la policía yo ya tenía todos los papeles.  Inclusive mi madre adoptiva armó tal escándalo que con tal de sacárselos de encima le dijeron: Por favor, disculpe”

“Mi padre adoptivo, inclusive murió en el campo de concentración de Flossenbürg. Creo que llegó al campo porque los nazis sabían que él tenía muchos amigos judíos y cuál era su pensamiento, y todo polaco que no era afín a los nazis trataban de limpiarlo”, recuerda Giza en referencia al padre de Danuta que ella también sintió suyo.

Entre sus cosas, Danuta había guardado una carta que Giza dictó a sus hermanas adoptivas de pequeña, cuando el padre-al que se habían llevado los nazis- no volvía.  “Yo lo extrañaba, dicté una carta diciendo “Papito mío, ¿cuándo vas a volver? Te extrañamos mucho. Tu hija chiquita te extraña y está llorando por ti”. Está fechada 23 de julio de 1944.

Las hermanas compartieron mucho tiempo y afecto después de su reencuentro

Danuta fue condecorada en varias ocasiones e invitada a participar en las Conmemoraciones del Levantamiento del Ghetto de Varsovia, del cual fue parte.

Danuta falleció el 6 de diciembre de 2018.

Danuta y sus padres fueron declarados “Justos entre las Naciones” el 24 de marzo del 2011.